sábado, enero 28

AMORES NOCTURNOS

Como cada noche,

te irás con las primeras luces del alba

a tu morada en sombras, vendrás a curar mi alma

de una enfermedad que desconoces

y que en porfiadas lágrimas te nombra.

Pero tú no me comprendes,

tan sólo te pido

que me ames y no me tengas preso

ni tampoco mis besos reduzcas al olvido.

Has sido

mi amante por largas noches de ensueños

y en desbordes, te he nombrado

en extraños reproches anhelantes

de otras vidas

sin que me hayas escuchado.

En infantil indecisión se me ha ocurrido

desenamorarme y dejarte,

para verte suplicante de mi pasión

el regreso y poner mis condiciones:

pero me ha asaltado el miedo.

Miedo a que no te importe,

miedo que me abandones

y que sea mío el llanto cuando tú te hayas ido.

Como cada noche,

te irás con las primeras luces del alba

a tu morada en sombras y ninguna,

ninguna otra ocupará mis sentidos

ni tendré la calma hasta que asomes,

desterrando al olvido

y majestuosa de plata,

mi novia luna.